El Grabado le Otorga a las Joyas un Valor Mucho Más Personal
Ya sea hecho a mano, con una máquina o con la tecnología más reciente
Recuerdo que cuando miraba el programa de televisión Laverne & Shirley, no podía evitar notar la gran “L” que tenía Laverne en cada camisa y en cada suéter. Si hubiese estado en una mejor situación económica, ¿tendría grabado en sus joyas el nombre “Laverne” o al menos la letra “L”? Si hubiese sido una mujer joven e independiente en el mundo contemporáneo, ¿tendría la letra “L” tatuada por todo el cuerpo? Sólo podemos quedarnos con la duda.
La personalización de joyas y otros artículos que poseemos es una forma de crear algo único sobre nosotros mismos, de separarnos y distinguirnos de los miles de millones de seres humanos, o tal vez sea la forma de enviar un mensaje acerca de quiénes somos y qué sentimos.
Posiblemente no exista otro aspecto más personalizado de aquello que portan los humanos que las joyas con las que adornamos nuestro cuerpo, o lo que escogemos como obsequio para embellecer a los demás. Como tasador de joyas, mi trabajo se centra en establecer el valor de las joyas. Entre otros aspectos, busco la rareza, la calidad y la facilidad de venta, pero el valor disminuye si el artículo está personalizado, por ejemplo: “Es un reloj precioso. Se encuentra en excelentes condiciones, es un artículo verdaderamente lujoso y muy atractivo. Ah, pero la tapa trasera está grabada, qué desgracia”.
Los grabados y toques personalizados que haya añadido el dueño de la joya hacen que la misma tenga un valor especial para ellos, pero puede que también afecte el valor comercial en algún momento. Lo que resulta atractivo para un individuo puede que no lo sea para otro, y esto disminuye las probabilidades de reventa de un artículo.
En mi caso, observo las joyas personalizadas desde una perspectiva diferente cuando no las estoy tasando.
Un Breve Antecedente
La personalización de los objetos personales es algo que se hace desde hace siglos. En un principio, la personalización se hacía únicamente con fines de identificación. Un buen ejemplo son los anillos para lacrar que se utilizaban en épocas pasadas. Un noble doblaba la carta o el rollo, colocaba cera sobre la solapa y luego hacía una marca con un anillo en la cera, lo que sellaba el documento para que el receptor estuviera seguro de que nadie lo había abierto antes que él.
Reyes, reinas, papas y otras figuras de elite tenían anillos grabados con el escudo familiar u otro símbolo único de ese individuo o cargo. Así solía identificarse el remitente. Por ejemplo, cuando un papa moría, su anillo se destruía inmediatamente para que ninguna otra persona pudiese crear un documento falso en nombre del papa fallecido.
Métodos de Personalización de Joyas
El grabado “a mano” es la forma más común para personalizar una joya. Los artesanos expertos crean diseños cortando un objeto con otro más duro. Como los metales de las joyas de oro o plata son relativamente blandos, se utilizan grabadores metálicos con filo o “buriles” . Los grabadores pueden seguir un patrón o usar su propio talento artístico para añadir iniciales, palabras y diseños. Los patrones más complejos, como los escudos de familias, animales o escenas de batallas se denominaban “entalladuras”, término italiano para “tallado”.
El camafeo es la técnica opuesta, donde el material cortado deja una representación elevada en lugar de hundida. Así es, los camafeos en concha que aún hoy siguen siendo populares en realidad están grabados.
Hoy en día, la mayoría de los grabados se hace con máquinas. El método más común se lleva a cabo empleando un pantógrafo para seguir un patrón, luego se agranda o achica el tamaño a gusto y se lo traslada al objeto que se grabará. Las máquinas grabadoras han existido durante bastante tiempo, pero hoy en día se utilizan láseres y computadoras para crear diseños en joyas cuyo límite es la imaginación de cada individuo.
Relicarios con Fotos Grabadas
Un método bastante reciente que se utiliza para personalizar joyas es el “grabado de fotos”. No voy a profundizar los aspectos más técnicos, pero basta con decir que se puede trasladar cualquier fotografía en color, a una joya. Cuando trabajaba como vendedor minorista, pude ver de todo grabado en joyas, desde fotografías de seres queridos que habían fallecido, niños, mascotas hasta escenas de vacaciones en familia.
¿Sabía que puede tener esa foto antigua grabada en el propio relicario que ha guardado durante años, y así resguardarla del deterioro causado por el tiempo y el clima? Por supuesto, todavía podemos grabar (a mano o con una máquina) cualquier mensaje que desee en la parte trasera del artículo.
La Personalización de las Joyas
Siempre sentí que un artículo grabado tiene un valor más especial. Después de todo, nadie compra algo y elige no grabarlo porque le preocupa no poder revenderlo. La joya que se obsequia de generación en generación tiene una historia más íntima cuando puede atribuírsele una persona o fecha en particular.
Ese reloj de bolsillo del abuelo es fabuloso, pero el hecho de que tenga un mensaje grabado de la abuela, con la fecha de la ocasión dentro de la tapa, hace que sea aun más especial. Hace que aquellas personas, que quizá ya no estén entre nosotros, regresen a la vida.
Es por ello que siempre recomiendo, de ser posible, que tengan un artículo grabado. Los clientes cínicos podrían pensar que un joyero que les ofrece grabar un artículo sólo quiere asegurarse de que no puedan devolverlo. Puesto que no soy tan ingenuo, asumo que esto puede llegar a suceder.
En lo personal, yo ofrezco grabados para el sujetabilletes que alguien va a comprar, para mejorar el diseño y que el dueño pueda identificarlo fácilmente. Y en algún momento futuro, puede que sea más especial ya que está identificado como el sujetabilletes de papá.
Por lo general, suelo convencer a las futuras novias para que graben sus alianzas de boda, al menos con la fecha, si no es con algún mensaje en particular. Después de todo, como soy hombre y sé que la fecha más importante para nosotros puede ser el comienzo de la temporada de fútbol, es bueno saber que puedo recordar la fecha de nuestro aniversario con tan sólo mirar mi anillo de boda.